En medio del caos que sacude al sistema bancario, Bitcoin y el oro están formando una alianza cada vez más fuerte que no se había visto desde el inicio de la crisis bancaria a principios de este año. La correlación entre estas dos reservas de valor ha alcanzado su punto máximo en siete meses, con un impresionante 80 en una escala que va de -100 a 100.

La última vez que vimos una correlación tan sólida entre Bitcoin y el oro fue durante la crisis bancaria de principios de año, cuando importantes bancos como Silicon Valley Bank y Signature Bank colapsaron, y los inversores buscaban refugio en activos que no fueran el dinero fiat o el mercado de valores. Desde entonces, esta correlación no había sido tan alta, hasta ahora.

Lo más sorprendente es que la correlación mensual entre Bitcoin y el oro se encuentra en niveles históricos. Solo en breves momentos de 2015, 2016, 2018 y 2020 hemos visto una correlación igual o mayor que la actual. Esto sugiere que Bitcoin y el oro están siguiendo caminos cada vez más similares como refugios seguros en tiempos de incertidumbre económica.

El aumento de esta correlación se debe en gran parte al impresionante desempeño de ambos activos en octubre. Bitcoin subió un 25% en el mes, mientras que el oro aumentó un 6.4%. El oro alcanzó sus máximos del año, llegando a los $2,000, mientras que Bitcoin superó los $34,000, una cifra que no había visto en más de un año.

A medida que los inversores abandonan el mercado de valores en busca de refugio en activos como Bitcoin y el oro, la crisis bancaria sigue afectando a las empresas financieras, que registran menores ganancias y caídas en sus acciones. En este contexto de incertidumbre macroeconómica, la unión de Bitcoin y el oro se fortalece, brindando a los inversores una alternativa sólida en tiempos turbulentos. Esta tendencia es un recordatorio de que, incluso en un mundo cada vez más digital, los activos físicos como el oro y las criptomonedas como Bitcoin siguen siendo refugios seguros para proteger la riqueza en tiempos de crisis financiera.